Ciertos agentes externos, como la contaminación ambiental, los tintes y el secador, y ciertos hábitos o elementos internos, como la dieta o la propia herencia genética, afectan al equilibrio hidrolipídico natural y humedad del cabello. Como consecuencia, la fibra capilar puede deteriorarse y deshidratarse, perdiendo propiedades naturales como la elasticidad o el brillo.
Las líneas nutritivas están formuladas con ingredientes específicos para compensar estos elementos, nutriendo e hidratando el cabello de forma que recupera todo su potencial y brillo.